Coches electricos cuidan planeta

En estos días, no es tan raro escchar en algunos lugares el silencioso zumbido de un coche eléctrico. A medida que el costo de comprar uno continúa bajando, se está volviendo más común hacer el cambio a vehículos eléctricos. Y esa tendencia solo continuará, luego del reciente anuncio del gobierno de que las ventas de automóviles totalmente de gasolina y diésel estarán prohibidas a partir de 2030 (esto no incluye los híbridos, que están permitidos hasta 2035). Gracias a la ley de watt sabemos que la energía eléctrica es el futuro de la humanidad (esto lo podemos saber en la ley de ohm ejemplos) y la salvación para nuestro planeta, ya que está se puede producir de manera natural y es mínimamente contaminante, así que es una excelente opción para seguir cuidando nuestro planeta.

El costo de funcionamiento de un vehículo eléctrico es significativamente más barato que el de un automóvil de gasolina o diésel. La electricidad hace que su automóvil sea más económico que la gasolina. Entonces, si bien el precio para comprar muchos vehículos eléctricos sigue siendo más alto que el de sus contrapartes de gasolina o diésel, gastará menos en costos de combustible cada año. Los costos de mantenimiento también son menores. En general, hay menos partes móviles en los autos eléctricos, esto significa que es mucho menos probable que tenga reparaciones costosas en piezas reemplazables como discos y pastillas de freno, el automóvil pasará menos tiempo fuera de la carretera, porque los servicios o reparaciones generalmente serán simples.  Lo principal es que los costos de mantenimiento no deben ir más allá de un chequeo básico

Muchos de nosotros nos sentimos atraídos por los vehículos eléctricos debido a su menor impacto en nuestro planeta. Es posible alimentar automóviles totalmente eléctricos con electricidad 100% renovable, lo cual es un paso vital hacia la descarbonización. Además, no emiten gases de escape, lo que puede tener un gran impacto en la reducción de la contaminación del aire local. Y ese es un cambio muy necesario y muy bienvenido para nuestras ciudades congestionadas.